jueves, 9 de octubre de 2008

La Salvación es Por fe IV Parte


Tú pues, que enseñas á otro, ¿no te enseñas á ti mismo? ¿Tú, que predicas que no se ha de hurtar, hurtas?


¿Tú, que dices que no se ha de adulterar, adulteras? ¿Tú, que abominas los ídolos, cometes sacrilegio?


¿Tú, que te jactas de la ley, con infracción de la ley deshonras á Dios?



Romanos 2:21-24





LA SALVACION ES POR FE IV PARTE



[Leer Romanos 2:17-29]



Explica Dios en este texto, que el Hombre, tu y yo, somos Hipócritas, predicamos y hablamos de Dios, señalamos a otros pero nosotros hacemos todo lo malo que predicamos que otros no hagan. El mundo lleno de mentiras esto es lo que hace, encomendar, mandar, ordenar, criticar, pero nosotros somos iguales, hacemos lo mismo.


Es tan fiel esta realidad que aun los Judíos, son comparados con todos los gentiles, con todos los que no son Judíos, serán juzgados de igual manera. No valdrá entonces Circuncisión alguna, no valdrán los sacrificios y ceremonias hechos, ni nada en lo absoluto favorecerá a este pueblo, a no ser que corra a los pies de Cristo… al igual que un Gentil pagano, pecador y sin Ley, será juzgado y condenado.


La circuncisión fue dada a Abraham y su linaje como señal, de su fe en la promesa que Dios les Había dado, ya que Abraham primero creyó a la Promesa y su Fe le fue contada por Justicia, entonces después vino la señal, que es la Circuncisión. Israel entonces toma la circuncisión como un método para alcanzar la Promesa y no creen en el Salvador que es Jesús, allí pierde todo sentido la promesa dad a Abraham. De la misma manera si tu hoy crees que por métodos o maneras, por ritos o costumbres alcanzaras la promesa hecha, la promesa de salvación, estas equivocado. Solamente por la Fe en Cristo Jesús, somos salvos, debemos creer que El es el Señor y entregarnos a El en cuerpo, alma y espíritu, entonces lo demás, es decir lo visible, será transformado por su poder, como señal de nuestra fe, de nuestro arrepentimiento y amor por El.


Solo de Dios vienen las Promesas y si creemos en su palabra y actuamos conforme a lo que esta scrito, entonces seremos circuncidados, no en el cuerpo, sino en el corazón, y esto será la señal de nuestra fe, que nos apartemos del mundo, del pecado, de la inmundicia, de las tinieblas.


Amado…esta promesa sigue vigente hoy para todo aquel que cree en Cristo Jesús, entrégate a El y alcanzaras la Bendición eterna en la Gloria del Cielo de Dios.



Bendiciones.



Más Devocionales!